Vigilancia en la modernidad tardía: El monitoreo telemático de infractores
Desde la década de 1980, varias leyes han introducido la vigilancia telemática de los delincuentes como parte de un catálogo punitivo que los estados pueden utilizar para hacer frente a los delitos. Entre los objetivos comúnmente Citados por el Gobierno, hemos encontrado objetivos instrumentales dirigidos a reducir la población reclusa, reducir el costo del estado y lograr un mayor control sobre las sentencias libres; los asociados con la prevención especial activa, evitando los efectos perjudiciales del encarcelamiento, brindando mayores posibilidades de reintegración y tratando de controlar la asistencia a los programas de intervención comunitaria; e incluso algunos programas bastante simbólicos, que parecen más poderosos en la respuesta a la delincuencia y muestran que el progreso tecnológico y la modernización también se aplican al sistema penal.
Uno de los objetivos tradicionalmente utilizados para facilitar la aplicación del seguimiento telemático se refiere a su posible impacto en la reducción de la reincidencia. En este sentido, es necesario tener en cuenta que, si bien el monitoreo telemático no constituye castigo, las consecuencias relacionadas con la prevención no deben esperarse, en particular, la literatura considera que está relacionada con el efecto disuasorio de la detección inmediata de amenazas, el desarrollo de oportunidades pro-sociales, y en particular con el impacto negativo que el monitoreo evitará el encarcelamiento, en comparación con tener un impacto positivo en esta área. Sin embargo, los resultados de estudios internacionales han sido mixtos y no hay evidencia concluyente para confirmar el impacto positivo de este asunto, ya sea para el modelo de puerta delantera o el modelo de puerta trasera.
Desde otro punto de vista, también cumple con su implementación, una necesidad asociada a la generación de alternativas rentables. A este respecto, se determinó que el impacto en la reducción de costos dependería en gran medida del diseño jurídico utilizado para adoptar ese enfoque, que era pertinente para el debate relacionado con la expansión de la red. Por lo tanto, si el monitoreo telemático se utiliza»in situ»en las prisiones, entonces se pueden esperar algunos ahorros directos del estado. Sin embargo, para todos estos casos, el monitoreo telemático entra en competencia en su alcance con otras alternativas al encarcelamiento, es más complejo visualizar estos ahorros.