El Reglamento de Organización y Funciones del Instituto Nacional Penitenciario, aprobado mediante Decreto Supremo N° 009-2007-JUS, establece que la Dirección de Tratamiento Penitenciario es el órgano de línea que tiene como función principal formular y proponer las políticas, normas, planes, programas y proyectos de desarrollo para la ejecución de las actividades de asistencia social, legal, psicológica, religiosa y de salud, así como de trabajo y educación en los establecimientos penitenciarios. Dentro de su conformación, se encuentra la Subdirección de Asistencia Penitenciaria, unidad que se encarga de organizar, supervisar y evaluar la ejecución de los programas de tratamiento de la persona privada de libertad en los servicios de asistencia social, legal, psicológica y religiosa. Además, se cuenta con un Órgano Técnico de Tratamiento (OTT), que es el encargado de desarrollar programas de trabajo y educación de acuerdo con las aptitudes y actitudes del interno/a, brindando servicios asistenciales de índole sanitario, social, legal y psicológico y otros que coadyuven a la rehabilitación. Todo esto conforme a lo regulado en el artículo 99o del Reglamento del Código de Ejecución Penal.
No cabe duda de que el trabajo y la educación son actividades que permiten a las personas obtener mayores oportunidades para el desarrollo de sus proyectos de vida. Corresponde al Estado generar las condiciones necesarias para el respeto y garantía de estos derechos fundamentales a todas las personas sin discriminación, incluso cuando se trata de personas privadas de libertad. Sin embargo, durante la supervisión a nivel nacional se ha constatado que no toda la población penitenciaria se encuentra inscrita en talleres de estudio o trabajo. Esta situación puede obedecer a diversos factores, siendo los más comunes en el ámbito penitenciario, el hacinamiento, la falta de infraestructura, la carencia de recursos humanos y logísticos para brindar estos talleres, el poco interés del interno o interna debido a las prohibiciones de beneficios penitenciarios, entre otras causas.